En Rumanía, recientemente los costos de construcción de las vías de alta velocidad casi se igualan a los costos de construcción de las autopistas, a pesar de que teóricamente las vías de alta velocidad deberían ser más baratas. Esto se explica porque el país solo recientemente ha comenzado a tomar en serio la construcción de vías de alta velocidad como alternativa a las autopistas. Según Gabriel Budescu, presidente de la Compañía Nacional de Inversiones en Carreteras (CNIR), actualmente cuesta lo mismo construir una vía de alta velocidad que una autopista. La CNIR es una nueva autoridad recientemente creada que se hace cargo de los futuros proyectos de la compañía responsable de la infraestructura vial (CNAIR), que gestiona las carreteras existentes. El primer proyecto de la CNIR es la vía de alta velocidad Focșani-Brăila, cuyo costo es de aproximadamente 14 millones de euros por kilómetro, lo que ya representa costos de autopista. Según Budescu, la clasificación de los proyectos se decide en función de la relación calidad-precio, el tráfico esperado y la evaluación de los costos. Además, señaló que se deberían modificar las normativas de las vías de alta velocidad, ya que según la regulación actual, el arcén de 1,5 metros de las vías de alta velocidad no es óptimo.